Evolución de las técnicas mínimamente invasivas en cirugía pediátrica: una revisión sistemática

Resumen

Este estudio aborda la evolución de la cirugía mínimamente invasiva (CMI) pediátrica, destacando sus beneficios, como una recuperación más rápida, menor trauma y mejor estética, así como la necesidad de herramientas específicas debido a las particularidades de la anatomía infantil. El uso de la laparoscopia en niños ha demostrado ser eficaz para reducir las hospitalizaciones y mejorar los resultados clínicos, a pesar de los desafíos técnicos. La introducción de la cirugía robótica ha traído nuevas posibilidades, con avances notables en urología pediátrica, gastroenterología y ginecología, permitiendo una mayor precisión en procedimientos complejos. La revisión sistemática analizó los avances en CMI en pediatría durante los últimos 20 años, evaluando intervenciones quirúrgicas, manejo postoperatorio e innovaciones tecnológicas. De los 150 estudios iniciales, 25 fueron revisados en su totalidad, resultando en la selección de 5 estudios que mejor se alinearon con los objetivos de la investigación. Estos estudios analizaron el impacto clínico de la CMI, identificando tendencias y lagunas, como la necesidad de más datos para validar la eficacia de los nuevos enfoques. Los resultados indican que técnicas como la microlaparoscopia y la cirugía robótica han permitido cirugías menos invasivas, con menos complicaciones y tiempos de recuperación más cortos. Sin embargo, a pesar de los avances, se necesita más estudios clínicos robustos para validar la seguridad y eficacia de estas técnicas, especialmente en áreas prometedoras como la cirugía fetal. Además de los aspectos técnicos, el estudio también enfatiza la importancia de una capacitación adecuada para los cirujanos. Los modelos anatómicos realistas y tecnologías como la impresión 3D han demostrado ser útiles en la formación de nuevas generaciones de cirujanos. También se destacaron alternativas no farmacológicas, como el uso de robots humanoides para reducir la ansiedad preoperatoria en niños. Aunque el futuro de la CMI pediátrica parece prometedor, barreras como el alto costo de los equipos y la falta de capacitación adecuada, especialmente en países como Brasil, aún limitan su implementación generalizada. Superar estos obstáculos es crucial para garantizar que la CMI se adopte ampliamente, proporcionando mejores resultados clínicos para los pacientes pediátricos.