La influencia de los ácidos en la Dermatología: curación, tratamiento y cuidado de la piel

Resumen

El uso de ácidos en dermatología ha demostrado ser eficaz en el tratamiento de diversas afecciones dermatológicas, aportando beneficios como la renovación celular, el control de la grasa, combatir el envejecimiento, aclarar las manchas y tratar el acné. Este estudio busca cumplir con los objetivos de sintetizar el uso, relevancia e influencia social en relación a los ácidos dermatológicos. A través de una metodología de investigación narrativa cualitativa utilizando las principales bases de datos como PubMed, Google Scholar y SciELO. Ácidos como el salicílico, glicólico, láctico, retinoico, hialurónico, tranexámico, azelaico, mandélico y otros juegan papeles fundamentales en tratamientos estéticos y terapéuticos, estando indicados para acné, melasma, arrugas, manchas y texturas irregulares. Sin embargo, su uso debe realizarse con precaución, considerando las características individuales de la piel y con orientación profesional, para evitar efectos adversos como irritación, sequedad o dermatitis. La introducción gradual de ácidos y la combinación adecuada entre ellos son fundamentales para optimizar resultados y minimizar riesgos. Además, la protección solar es fundamental, ya que el uso de ácidos puede aumentar la sensibilidad de la piel a la radiación UV. El tratamiento con ácido, cuando se realiza bien, puede mejorar significativamente la salud de la piel, promoviendo una apariencia más joven, uniforme y saludable.